Estrenamos nuestro casillero de victorias en esta sexta jornada de la temporada. Primer triunfo del curso, y en casa, en un partido redondo de los chicos dirigidos por Adam Rita. Los nuestros jugaron ante los Berlín Thunder el mejor partido en lo que va de año. No solamente por lo que terminó reflejando el marcador, ese abultado 48-16 final, sino por las sensaciones sobre el terreno de juego.

Nada más empezar a consumir los primeros segundos de partido ya se vivió una de las jugadas más tremendas del mismo. El retorno del kickoff protagonizado por Jéan Constant fue una bestialidad. Se quedó muy cerca de poner los primeros puntos en el marcador nuestro increíble ‘5’. Pero como ya sucedió hace una semana en Frankfurt, nuestro primer drive acabó con el primer touchdown de la tarde. Lo firmó Rémi Bertellin, que hizo bueno el pase a la endzone de Zach Edwards. Tavecchio completó la jugada anotando el extra point (7-0). Los Thunder se sobrepusieron a ese primer mazazo consiguiendo una rápida respuesta de Jones al otro lado del campo con el primer TD alemán. Su extra point no fue bueno, así que los Dragons se mantenían por delante en el marcador (7-6). Antes de que se terminara el primer periodo, Constant decidió dar un paso más a su inicio fulgurante anotando su primer touchdown, el segundo local, para incrementar la diferencia hasta el 14-6.

El segundo asalto fue algo más favorable al conjunto berlinés. Empezaron a recortar algo las distancias mediante un buen FG que les colocó a solamente cinco puntos (14-9). Minutos más tarde le darían la vuelta al partido con otro TD de Jones. El ‘7’ volvió a recibir dentro de la endzone un buen pase de Bryan Zerbe para que Berlín tomara la delantera con el 14-16. Pero no estaba todo dicho antes de que se llegara al descanso. Y es que faltando poco más de un minuto llegó otra de las jugadas del encuentro. Zach Edwards buscó un pase profundo de 35 yardas que terminó conectando con Jéan Constant. El estadounidense sumaba así su segundo TD de la tarde y permitía a los Dragons irse a los vestuarios con ventaja en el marcador (21-16).

Tras el descanso los jugadores de Adam Rita fueron a más, mientras el conjunto visitante fue menguando. En la segunda parte los Dragons secaron completamente la ofensiva alemana, que no pudo hacer un solo punto más. Por otra parte, nuestra ofensiva y la defensa siguieron estando a un gran nivel. Cogimos más ventaja en el luminoso a los cinco minutos de la reanudación. En una acción muy parecida a la que supuso en el inicio del choque nuestro primer TD, Edwards y Bertellin volvieron a conectar para dar algo de aire y tranquilidad a la parróquia ‘Dragon’ con el 28-16.

Con esa ventaja de prácticamente dos posesiones se entró en un último cuarto estratosférico. Explosionó el resultado el conjunto del Coach Rita en unos últimos quince minutos sensacionales. Sobre todo por parte de la defensa. Primero fue Jéan Constant quien firmó y sumó su tercer TD del día para redondear una actuación soberbia (34-16). Ese resultado obligó mucho a que los Berlín Thunder buscaran ir de manera mucho más directa y arriesgada hacia la endzone local para tratar de meterse en el partido y que las esperanzas de remontar no se desvanecieran por completo. Entre las prisas alemanas y la gran concentración de nuestra defensa llegaron dos acciones fantásticas que permitieron que el partido acabara siendo una fiesta mucho mayor de lo que ya estaba siendo. Primero fue Lucas Masero quien interceptó un pase muy profundo, pero sin un rumbo claro, de Zerbe. El ’20’ se hizo con el balón y lo retorno a la endzone alemana para firmar el primer Pick Six (41-16). Prácticamente a la siguiente acción llegó el turno de un Andy Vera que se encuentra en un estado de forma sensacional y con una confianza enorme. El ’27’ dio un salto increíble para cortar el pase alemán. Tocó el balón y posteriormente lo recogió antes de que tocara en el suelo para también retornarlo y firmar un segundo Pick Six que puso el definitivo 48-16 en el marcador.

Estalló de júbilo el Estadi Municipal de Reus con la primera victoria de la temporada de los Barcelona Dragons. Un triunfo muy necesario que puede suponer un punto de inflexión de cara a lo que resta de curso. Próxima jornada, cita complicada pero apasionante en Hamburgo ante los Sea Devils.