Primer partido a domicilio de la temporada 2023 para los Barcelona Dragons. Un verdadero reto ante una franquicia novicia en la European League of Football, pero con una trayectoria en ligas domésticas descomunal a sus espaldas.

El partido, al igual, que ante Helvetic Guards en la Week 1, empezó de la peor manera posible: los italianos se adelantaron con un Field Goal en el primer minuto del encuentro. Sin embargo, esta vez también se logró reaccionar rápido a las circunstancias y la maquinaria Conor Miller – Theo Landström empezó a carburar. El sueco anotó el primer Touchdown de la tarde tras un pase flotado a la esquina de la End Zone rival. Nuevamente, los Seamen Milano reaccionaron inmediatamente. No habían transcurrido ni 15 segundos cuando un pase profundo de Luke Zahradka encontró los firmes guantes de Juan Flores para anotar el 7-10. En ese momento, ya se preveía que los Barcelona Dragons tendrían que ponerse el mono de trabajo, ya que iba a ser un encuentro muy disputado.

Sin embargo, los cinco últimos minutos fueron de claro dominio Dragon, consiguiendo parar al ataque italiano, y anotando con un Touchdown de carrera de Eduard Molina. En el drive siguiente, una espectacular intercepción de Lautaro Frecha devolvió la posesión a los catalanes a mitad del campo. Tras esa jugada, Conor Miller puso un pase de más de 30 yardas para la recepción de Theo Landström. Jugada que se saldó con un nuevo Touchdown del sueco para irnos al final del primer cuarto 21-10.

Antes del descanso, los italianos estuvieron mejor, anotando dos touchdowns en jugadas largas, uno al inicio del segundo cuarto, y otro al final de este. No obstante, Raul Cernuda se estrenó en una jugada de pura potencia: recibiendo un pase por el medio, girando y llevándose a dos defensores rivales por delante para marcharnos al descanso con un marcador de 27-24.

A partir de la primera anotación que hicieron, los Barcelona Dragons fueron siempre por delante en el marcador, combinando el juego terrestre (y haciendo el doble de yardas que el rival 110-54) con aéreo en ataque, y mostrando un gran equilibrio en defensa. Llegados al último cuarto, Montón hizo subir el 41-27 al electrónico, pero todavía quedaba todo el tiempo del mundo para una posible reacción italiana. Cosa que se llevó a cabo restando 6:55 minutos. Con una diferencia de tan solo 8 puntos en el marcador, los Seamen Milano dispusieron de la oportunidad de empatar en los últimos compases del encuentro. Necesitaban anotar un touchdown y convertir los dos puntos. Estaban dentro de la yarda 5 de los Dragons, pero un fumble del Running Back Ali Khalife, que hasta el momento estaba completando un gran partido, permitió recuperar el balón a Benjamin Egbudiwe, finalizando el encuentro con un resultado de 41-33.